Indefensa

CAPITULO. 27

(NARRA Aitana)
Liam: No, me refiero a que, no se, estar con tigo es especial siento como si solo existiéramos tú y yo en otro mundo distintos, es algo único.
Yo: Me siento muy a gusto junto a ti...- Me cogió la mano, cerré los ojos, cuando nuestros labios estaban a escasos milímetros de juntarse, el teléfono e Liam sonó, que oportuno, pensé. Abrí los ojos, él contestó.
Liam: Me tengo que ir, es el manager, te llevo a los estudios y luego me voy.- Afirme con un movimiento de cabeza seco y sin gracia. Todo era muy raro. El camino en el coche fue silencioso. Finalmente llegamos, me bajé, Liam m cogió del brazo.
Liam: Mañana te llamo, que descanses.
Yo: Igualmente. Le fui a dar un beso pero no coincidíamos a que lado de la mejilla darnos, obtamos por darnos un abrazo.
Cuando subí al cuarto y vi que todas estaban dormidas, lo más silenciosamente posible me fui a meter en la cama. Intenté dormirme pero no podía parar de pensar en él. Sus ojos marrones, su risa blanca, su piel suave y su pelo castaño me tenían loca. Seguí dormirme después de haber pasado dos horas con una sonrisa de oreja a oreja.

(NARRA Tú)
Eran las nueve y media cuando me levante, las demás dormían como ceporros. Me aburría de tal manera que salí a correr. Tras estar una hora corriendo, decidí que ya era momento de volver a casa, cuando por el camino, unos periodistas me impedían el paso.
Periodista: (Tú) ¿son verdad los rumores que mantienes una relación con Louis Tomlinson, el integrante de One Direction?- Yo seguí mi camino, fui lo más rápido posible, en la entrada había unas trescientas fans esperándome, no paraban de insultarme. Cuando por fin logre entrar me llamo Louis.
Louis: (Tú), ¿estas bien?
Yo: Ahora sí.
Louis: Siento lo ocurrido...
Yo: Tú no tienes la culpa, no e preocupes....
Louis: ¿Quieres que quedemos para tomar un café luego a la tarde?
Yo: No creo que sea buena vernos, o al menos hasta dentro de una semana.
Louis: Tienes razón, si necesitas algo llámame.
Yo: Descuida.- Subí al cuarto, las chicas me esperaban impacientes, desde la ventana se veía a más y más gente venir, realmente sentía miedo...