El secreto...

CAPITULO. 9

Cuando subí al cuarto y entre en la habitación, estaban las chicas mirándome de oreja a oreja, sentadas sobre la cama.
Aitana: ¿Cómo es?
(Tú): ¿Huele bien?
Janire: ¿Es majo?
Helene: ¿Dice tacos?- Esa pregunta estaba un poco fuera de contesto, por lo que nos quedamos mirándola.

(NARRA Janire)
Estábamos histéricas, queríamos saber como era, parecíamos búhos. Aroa nos comenzó a contar la historia de pe a pa. A nosotras se nos caía la baba, yo tenía dudas, por lo que contaba Aroa parecía un mutuo amor a primera vista, pero no le dije nada para que no se hiciera ilusiones, en el buen sentido.
Escasos minutos de que Aroa terminara de contarnos lo ocurrido, nos anunciaron que debíamos bajar a ensayar. Nos preparamos y subimos al ensayo. A alguien le había sentado muy bien su encuentro con Harry, Aroa había mejorado mucho, tenía mucha más confianza en sí misma. Estábamos muy orgullosas de ella. Eso sí, nos suplicó que no se lo dijéramos a nadie, ni siquiera se lo avía dicho a su madre.
Bajamos a cenar, estábamos comiendo el segundo plato cuando a Aroa le sonó el teléfono.
Aroa: Ui, pero... si es.... mi, mi... madre.- Se fue a hablar en privado.
Yo: O soy yo, o Aroa está algo rara....
Aitana: ¿Algo?
Helene: Janire tiene razón, Aroa está rara.
Yo: ¡Le puede haber pasado algo!
Aitana: Tenemos que descubrirlo para poder ayudarla.
(Tú): ¡¿No creéis que estáis exagerádnoslo un pelín?!
Yo: No tenemos que averiguarlo, por el bien de Aroa.
Helene: Chsss, ¡Que viene!- Se sentó.
Aroa: ¿De que hablabais?- Nos miramos entre nosotras.
(Tú) Eee... ¿del tiempo?
Yo: ¡SI! Del tiempo...- Aroa nos miró extrañada.
Aroa: No en serio...
Helene: ¿Que?
Aroa: ¿Por qué os habéis calado cuando he llegado?
Aitana: ¡Ui, que sueño!- Fingió bostezar. Aroa nos echó una mirada fija, levantando una ceja, nosotras dejamos las bandejas y nos fuimos a la cama. Nos hicimos las dormidas. Aroa mientras, hablaba con alguien a través de mensajes. Helene y Aitana no paraban de hablar sobre el tema.
A mitad de la noche, Aroa se levantó, se aseguro de que estábamos dormidas, y con el ojo entre abierto, pude ver como salía del cuarto, yo desperté a las demás, la seguimos. Bajó a bajo, donde se encontraba la recepcionista, la que la entregó unos papeles.
Yo: ¡¿Pero que está haciendo?!
Aitana: ¡La habrá metido en algún lio!
Helene: Aitana tienes razón, ¿estará amenazada por alguien?
(Tú): Chicas, en serio, tenéis que dejar de ver canales de pago.
Yo: ¡Cuidado, que sube!- Nos fuimos corriendo, que por cierto, casi me caí por las escaleras, nos metimos a la cama, con el único ojo que tenía abierto, pude ver como Aroa se metía a la cama sigilosamente.
Al día siguiente...